Dos velas negras

Mi nueva casa es pequeñita y antigua y, como tal, hay cosas que no funcionan. Nada más entrar descubrí que inundaba el piso de la vecina de abajo cuando me duchaba. Por suerte, dicha vecina es Miss Chain y, por suerte, con una llamada a la inmobiliaria, vino una mini-patrulla de fontainers a solucionar el asunto. Ya que estaban en casa, aproveché para que solucionaran todo lo relacionado con tuberías y los secuestré durante un buen rato, obligándolos a desatascar, atornillar y cambiar todo tubo que hiciera falta. Y todo, a cambio de una firmita, ya que el seguro, o la inmobiliaria, se encargan del tema "son 10.000".

A los pocos días empecé a sospechar que la lavadora tampoco terminaba de ir del todo bien. Aunque le cambiara el programa, reiniciara o le pusiera una estampita a san ariel, la ropa salía empapada y con restos de jabón. Así que me he tirado semanas lavando tangas a mano, escurriendo las sábanas en el lavabo y goteando el tendedero de la sufrida Miss Chain.

Esta mañana la inmobiliaria pareció espabilar y me mandaron a un técnico a casa. Después de echarme la bronca porque llegaba tarde (perdddooooooooon, es que me estaba divirtiendo en el curro, donde me han tenido con el culo pegado al asiento en una multiconferencia de 2 horas y media... sin ir al baño desde las 10, muerta de hambre y con la oreja en punto de ebullición).

Después, todo normal: abre la lavadora, coloca una correa en su sitio (el origen del problema), cierra la lavadora y rellena el papel. Y ahí empieza el problema. Que me quiere cobrar (36 euros por 2 minutos). Y yo que no, que eso lo hace la inmobiliaria, que corre con los gastos. Que se me pone farruco. Que yo me pongo más. Viendo que a cabezota no me va a ganar, coge la puerta. No sin antes mirarme a los ojos desafiante y decirme: "Te pongo en la lista negra".

Así que, chicos, estoy en la lista negra de los técnicos de lavadoras. Espero que no me haya puesto también dos velas idem.